top of page
Foto del escritorAntes de ser Calle

Arana y Goiri: El padre del nacionalismo Vasco


La calle Arana y Goiri desemboca (por su sentido de circulación) en la zona del complejo turístico de Punta Mogotes al 1800 de su nomenclatura; en el extremo (al 12.400) se la encuentra bordeando el Autódromo ciudad de Mar del Plata, en el barrio con el mismo nombre. Después transita por el barrio Gral. Belgrano e ingresa al barrio Don Emilio por cuatro cuadras. Recién reaparece a la altura de avenida Polonia, en el barrio Fortunato de la Plaza, atraviesa El Progreso, Cerrito y San Salvador; Termas Huinco, Colinas de Peralta Ramos para concluir, como dijimos en el barrio Punta Mogotes.


¿Quién fue? Escritor, político y filólogo español. Padre del nacionalismo vasco, nació en Bilbao, en 1865. Procedente de una familia carlista del barrio de Abando, Sabino inició su educación en Bayona (Francia), adonde habían huido en 1873, al descubrirse la implicación de su padre en el contrabando de armas para los partidarios de don Carlos (VII). Después pasó por un colegio de jesuitas y completó su formación aprendiendo vasco durante una larga convalecencia.

Interrumpió sus estudios de Derecho en la Universidad de Barcelona al morir su madre, en 1888. Desde entonces, aislado en su casa de Albia, se dedicó a la investigación histórica y filológica, obsesionado por la identidad del pueblo vasco. Elaboró multitud de artículos (la mayoría sobre temas lingüísticos) que, en 1892, recopiló bajo el título Bizcaya por su independencia; en 1893 los presentó ante unos cuantos adeptos en un acto que representa el arranque de su actividad política (el llamado «juramento de Larrazábal»).

Su ideología de entonces, racista y reaccionaria, no desentonaba en el contexto europeo de fin de siglo, en el que proliferaban los nacionalismos xenófobos y chovinistas; aparte del referente mítico de la lengua, común en la mayor parte de los nacionalismos europeos desde los románticos alemanes, Sabino dotó a su movimiento de un tinte tradicionalista (reclamación de los «fueros» como constitución propia del país) y de un confesionalismo católico rayano con el integrismo, que quedaron reflejados en su lema Dios y leyes viejas. Creía haber descubierto los principios eternos del «ser» vasco, a cuyo olvido atribuía la decadencia histórica del país y su sometimiento a ideas foráneas.

Hizo objeto de sus ataques a los inmigrantes venidos de otras regiones de España, a los socialistas y al movimiento obrero en general, así como a los principios de tolerancia del liberalismo; consiguió así entroncar con los temores y las frustraciones de las clases medias de la provincia de Vizcaya, intensamente sacudidas por la reciente industrialización, que acogieron la propuesta nacionalista como argumento ideológico de su lucha contra la clase obrera y contra el Estado centralista de la Restauración, al que consideraban aliado de los grandes capitalistas autóctonos.


En junio de 1893 apareció el primer número de Bizkaitarra, boletín informativo de publicación mensual a partir de enero de 1894. El 31 de julio de 1895 se constituyó en Bilbao el Bizkai-Buru-Batzar, un Consejo Superior para tratar los asuntos del nacionalismo vizcaíno, con el que Sabino Arana pretendió iniciar la organización política del nacionalismo vasco. El 4 de septiembre de 1901 el Gobierno Civil de Pamplona hacía pública una circular en la que se recordaba a los maestros que la enseñanza debía impartirse en castellano en todo en territorio nacional. En numerosos lugares de Navarra y de las provincias vascongadas, comenzó a utilizarse la lengua vasca en las escuelas, especialmente desde que se inició el debate sobre el nacionalismo vasco, cuyo más destacado teórico era Sabino Arana. Éste fijó la posición de su partido, el que se denominaba ya Partido Nacionalista Vasco (PNV), en unas declaraciones que hizo en La Gaceta del Norte (1902). Su objetivo era lograr una autonomía, lo más radical posible, dentro de la unidad del estado español, y a la vez más adaptada al carácter vasco y a las necesidades modernas. Fue encarcelado por felicitar con un telegrama a Roosevelt, presidente de Estados Unidos, por el desastre de España en Cuba; por esa razón, nuevamente fue a parar a la cárcel de Larrínaga. Entre sus obras destacan las Lecciones de ortografía del Euskera Bizkaino y los Orígenes de la raza vasca, incluidas en sus Obras completas (editadas en Buenos Aires, 1965).

Su obra poética cristaliza en 33 himnos, poemas y canciones; su periodismo batallador en más de 600 artículos y sus obras euskerológicas, literarias y políticas publicadas en vida en 14. Quedan desparramadas en colecciones particulares o se han perdido muchas de sus cartas. Agotado por 17 años de lucha, sale de la prisión gravemente enfermo, muriendo en Sukarrieta el 25 de noviembre de 1903, a los 38 años.

129 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page